El Santo de la Feeeeriaaaa!

Hace un año nos abandonó en la Madre Patria y regresó a la colombie, por lo que es importante recordar a "El Santo": un gran e inolvidable amigo del master, a quién le aguantamos unas buenas borracheras.

Gracias a él, todos los extranjeros que van a Colombia sólo quieren ir a Cali, pues decidió que era excelente idea gritar durante 6 horas de camino Madrid-Pamplona (en San Fermines) "que viva la feeeeeeeria hijueputaaa.....Cali, Chipichape y Yumboooo", mientras le servía aguardiente a todos los que iban en el bus. Esto, tanto de ida como de vuelta, por lo que no sé si la gente del master aprendió algo en clase, pero esa frase los dejó marcados.

En otro viaje a Lisboa no lo querían dejar entrar a un barcito por estar un poco pasado de copas, aunque, tras insistir, le dijeron que bueno, pero tenía que pagar 200 euros de entrada!! Así que él, emocionado, se metió la mano al bolsillo y sacó:..........monedas, las cuales contó tambaleando y enfocando con un sólo ojo, para ver si de 50 céntimos en 50 llegaba a los 200.

Ante esta tierna acción (y la rogadera de los otros 15 que ya estábamos adentro) lo dejaron entrar, pero a la media hora tuvimos que montarlo a un taxi rumbo al hotel. Oh sorpresa cuando llegamos todos de fiesta a las 8am y vemos un bulto en el pasillo del hotel frente a nuestros cuartos. El Santo había pedido una llave en la recepción y le habian dado cualquiera de los 6 cuartos, así que después de dormir unos minutos se dió cuenta que no estaba en el suyo. Y claro, lo lógico en el momento era salir, sin zapatos ni llaves...cómo se había quedado afuera, decidió que lo mejor era echarse una siestita en el piso mientras esperaba a que alguien llegara.

Así que cuando volvíamos al Hotel, él estaba arrunchado en el tapete, mientras señores y señoras muy arreglados, bajaban a desayunar su bufette 5*. Desde ese momento, tenemos prohibida la entrada a cualquier Marriot en territorio europeo....pero eso sí: que viva la feeeeeeeeeeriiiiiaaaaaaaaaa!!!